Vientos con ráfagas de hasta 80 kilómetros por hora azotaron en las últimas horas a diferentes regiones del departamento de Potosí, provocando una serie de daños materiales y ambientales.
El responsable de la Unidad de Gestión de Riesgos del Gobierno Autónomo Departamental de Potosí, Javier Gonzáles, informó que se registraron desplomes de muros en unidades educativas, destrucción de techos de calamina e incluso el incendio de una vivienda. Además, se reportó la muerte de animales a consecuencia de las inclemencias climáticas.
En total, 11 municipios resultaron afectados: tres en el sudoeste, dos en el sur, dos en el centro y tres en el norte del departamento. Entre los incidentes más graves se encuentra la caída de árboles en los municipios de Yocalla y Llallagua, lo que ocasionó la interrupción de caminos y riesgo para transeúntes.
Las viviendas dañadas perdieron principalmente sus techos de calamina, dejando a varias familias expuestas al frío y la intemperie.
Las autoridades recordaron que la alerta naranja por fuertes vientos permanecerá activa hasta el 23 de agosto, por lo que recomendaron a la población tomar precauciones y asegurar techos, ventanas y estructuras vulnerables.
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