Más de 40 migrantes, entre ellos un bebé de pocos meses, murieron a raíz del naufragio de su embarcación frente a la costa italiana, no lejos de la ciudad de Crotone, en Calabria (sur), pocos días después de aprobarse una controvertida normativa de salvamento de migrantes en el mar.
«De momento, 80 personas fueron recuperadas con vida, algunas de ellas lograron alcanzar la orilla tras el naufragio, y se encontraron 43 cadáveres«, informó un comunicado de los guardacostas.
«Decenas y decenas de muertos ahogados, incluidos niños, muchos desaparecidos. Calabria está en duelo por esta terrible tragedia», lamentó en un comunicado Roberto Occhiuto, presidente de la región calabresa.